Quisiera encontrarte ...
Publicado en Oct 22, 2012
Esta noche trato de recordarte tímidamente entre mis brazos dormido, acurrucado en las mantas cálidas, con el cabello arremolinado en la nuca, tus manos laboriosas sobre mi tibia piel de pasados veranos ... Y no te encuentro.
Te busco entre la colección de libros que guardamos, en el tapiz peruano que con temor encerramos en una valija y subimos a un avión, en tu perfume de siempre, que hoy reconozco en otras pieles, en la copas de cristal donde tanto te complacía degustar algún elixir, de esos que Dionisio el dios del vino, alguna que otra vez nos acercó, te busco en los cajones de "cosas viejas", en los papeles que guardaste con tanto celo, en tu tabaco, en el chocolate de los viernes por la noche ... Y no te encuentro. Te busco en el recuerdo de ese viaje a la Península, sobre el azul del mar, en el ruido ensordecedor del motor de algún barco ... Y no te encuentro. Me he quedado sola de vos, de tus manos sobre mi piel, de tu boca en la mía, de tu pensamiento y nuestras conclusiones, de tu mirar enamorado alguna vez, de la calidez de tus palabras sinceras, de tus ojos tan de niño; me he quedado sola. Quisiera encontrarte, aquí, en nuestra casa; volver a reconocerte en la mesa. Quisiera encontrarte en algún lugar lejos, al sol; quisiera volver a ver tus ojos. Mas la realidad es que ya nunca más, el calor será el mismo. Nunca más, serás mío. Hoy otros brazos y otros ojos son los tuyos, los profundamente tuyos; y yo, sigo aquí, en nuestra casona, buscándote.
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Karen Izzo