Se suicidó con un triste rock and roll
En sus ojos brilló una tristeza que no logró ocultar
Las lágrimas mojaban su rostro
Hasta llegar a sus labios
Allí se convertían en el licor de la amargura
Abriendo paso a sentimientos de dolor y de angustia
Pensando sin parar en la muerte.
Su mente estaba exhausta
No podía siquiera recordar un momento feliz.
Tomó su guitarra, un lápiz y papel
Mientras tocaba iba escribiendo las notas
Melodía triste que surgía de su corazón envenenado
Maldita música, representaba su agonía, su depresión.
Poco a poco el dolor le iba envolviendo los huesos
Seguía tocando, escribiendo
La guitarra sonaba cada vez más lastimera
De sus cuerdas brotaban lamentos desgarradores
Un llanto transformado en canción
No eran sus dedos los que tocaban, era su corazón.
De pronto sintió un frío terrible
Escribió las últimas notas
La respiración se le entrecortaba
Iba sintiendo cómo sus parpados le pesaban
Los dedos se iban endureciendo
Ya no podía tocar ni escribir
El último aliento se escapó de su pecho
Y se escondió entre las cuerdas.
Finalmente murió…
Y su guitarra se calló para siempre
Se abrazó al silencio del triste rockero.