Porqué vivir peleando entre nosotros, es que acaso no bastan las guerras en medio oriente, las luchas internas en algunos países, el calentamiento global, la recesión de la economía, la crisis mundial, el agotamiento del principal elemento de vida: El agua... ¿No basta eso como para continuar viviendo mal entre nosotros?, no es momento ya para dejar de lado todas aquéllas estupideces que el ser humano se ha inventado en contra del otro y empezar a amar: Cuando seamos capaces de amar, empezando por amarse uno mismo, luego al de tu lado y ese amor lo traduzcamos en cosas buenas, te darás cuenta que las cosas van a mejorar, quizá no podamos hacer nada por todo lo que ya está arruinado, pero si por el presente en el cual vivimos y el futuro que nos espera.
 
No sé porqué el ser humano siempre espera ocasiones especiales para ponerse a meditar sobre algo; no es que sea así siempre, pero ocurre generalmente; o de lo contrario tiene que acontecer algo, que muchas veces es malo para que recién tomemos conciencia de muchas cosas que suceden.
 
No estamos acostumbrados a escuchar a los demás o a tomar en cuenta sus experiencias vividas y hacerlas nuestras, preferimos tener que pasar nosotros mismos para recién decir ¡sí, él tenía razón!
 
Hace más de 2000 años, nació un tipo extraordinario que revolucionó al mundo. Mucho antes que él de seguro existió miles, pero éste ha marcado la historia de toda la tierra, de generaciones tras generaciones de humanos. En toda cultura se conoce de él, la gente lo conoce aunque diga no creer en lo que hizo, en su historia, en su estilo de vida y en su trascendencia humana y divina.
 
Y más que su divinidad es su modo de vida, su manera de ser, su mensaje lo que ha ido motivando a cada vez más personas. Revisa sobre Jesús y descubrirás un modo distinto de vivir, un modo distinto de actuar, no solo de ser cristiano ( que ahora entendemos por ir a una iglesia) Ser cristiano es ser un seguidor de Cristo, del Cristo vivo y Resucitado, es cargar con tu cruz y ayudar a cargar la cruz a los demás, es aferrarte a vivir en armonía con los demás, a vivir en el amor, en comunidad; que es lo que afirma la eucaristía: La comunión (común unión de unos con otros).
 
En el siglo pasado (XX) mientras aún vivía Juan Pablo II “Karol Wojtyla” conocí mucho de él y no puedo declararme tan fan de otra persona como lo soy de él, porque desde su mirada cautivadora, hasta sus mensajes y obras, han sido de lo más extraordinarias para la humanidad vivir como vivió él, es claro ejemplo de amor, de entrega, de fe.
 
Muchos como Jesús, como Juan Pablo II, hay en cada lugar del mundo, que no necesariamente son conocidos por el mundo entero como éstos dos personajes, pero que son claro ejemplo de amor, de entrega; hacia los demás; tú, yo todos podemos ser uno más de aquéllos que quieren amar y entregarse hacia los demás, desde tu estilo de vida, no necesitas iglesias, ni monasterios, ni nada, solo necesitas querer hacer bien las cosas y encaminarte por el sendero de los que quieren ayudar a los demás y eso se hace de mil formas, desde regalando una sonrisa o desde la amabilidad, hasta las grandes obras. Solo está en ti querer hacerlo, no hay excusas. Toma conciencia y decídete: La vida es corta y necesitas los mismos esfuerzos, las mismas agallas para hacer el bien o el mal. Solo está en ti decidir. El mundo va a ser mejor si todos somos mejores personas, mejores hermanos, mejores hijos, mejores ciudadanos.