DESPERTAR DE LA LBIDO
Publicado en Dec 20, 2012
En medio de la noche una sombra furtiva cubierta de sigilo llegó al lecho de Aminda. ¡Ella quiso gritar! para pedir auxilio, pero todo fue en vano... una mano sobre su mano una boca sobre su boca un cuerpo sobre su cuerpo en un afán desesperado... Luego, en un sólo ritmo dos impulsos contrarios ahora complementarios se funden en orgasmos. Después, sola llora Aminda entre sábanas descompuestas manchadas de roja tinta, no duerme, sigue despierta, espera que vuelva la noche para dejar abierta la puerta
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Jos de la Cruz Garca Mora
Battaglia
Me confundió un poco tu texto pues percibo en un principio un abuso y al final un deseo...... es así o me equivoco..... aunque claro eso no cambia en nada el que te diga que me ha gsutado.....
Saludos amigo!!!
kalutavon
si no hay fuerza de voluntad, ese mounstruo nos consume como cualquier vicio. Por ello Aminda... deja la puerta abierta.