sentado frente a mi ventana
observo la belleza del atardecer
que se funde en mi mente,
templo de mis pensamientos
donde el sol se esconde
tras las nubes, las estrellas
me privan de su brillo
que se pierde en algun lugar
remoto del universo,
y los pájaros ya no cantan
su dulce melodía
pues sus ojos auguran
que algo ocurrirá:
por antojo del destino,
el tiempo y la distancia 
vuelven a separarnos
y antes de que sea tarde
quiero decirte que...
 
...que cada mañana despertaré
con la bella pero fantasiosa
ilusión de verte,
la que será desilución
cuando mi ingenuo corazón
descubra la distancia
que separa los caminos
enhebrados por nuestras vidas.
 
...que cada canción que escuche
me cantará tu recuerdo 
que se clavará cual puñal
en el alma mia y jugará
con mis tristezas
y mis alegrías (tristezas también
cuando mi joven corazón
llore por tu ausencia). 
 
...que al caer, la lluvia llorará conmigo
el no tenerte a mi lado
y el viento me traerá el sonido de tu voz
y yo le susurraré poemas 
y estaré seguro de que
tu los oíras, y sentirás
en ellos mi tristeza,
consecuencia de tu ausencia.
 
...que en cada atardecer
veré al sol esconderse
entre las nubes
blancas de ternura
y entonces renacerá
como el sol en la mañana
el recuerdo de tu alegría,
causa de mi felicidad.
 
...que cada noche miraré al cielo
y las estrellas
complices de la mirada
perdida de mis ojos
dibujarán en el cielo
el recuerdo de tu amor
que se perderá en mis ojos
como aves en el horizonte.
 
...que cada noche miraré al cielo
y mis ojos contemplarán la luna
y en ella tu mirada profunda
que, cual rayo de luz
traspasa mis ojos
y llega al alma mía
donde nace el fuego
que enciende mi amor 
 
...que cada noche me dormiré
pensando en tu sonrisa
y mi corazón se alegrará
cuando en mis sueños
te vea llegar por el horizonte
y mi alma te dé un abrazo 
(de esos que hablan
cuando la mente no encuentra
las palabras correctas).
mas al despertar
tu imagen se habrá esfumado
entre los rayos de luz
que amanecen ante mis ojos
y necesitaré un abrazo
(tu abrazo) que me devuelva
la alegría que me faltará
nacida tu ausencia.