LA PIRMIDE MGICA
Publicado en Jan 14, 2013
LA BATALLA DE LA PIRÁMIDE
Desde hace días que los mensajeros elegidos recorrían cada una de las comunidades, llevando siempre una flecha encendida que delataba la gravedad del asunto que debían comunicar. Pero nadie estaba preparado para lo que verían sus ojos esa mañana: un ejército de casi cien mil hombres descendía por las escarpadas cuestas de Chacabuco, acercándose rápidamente hacia el Wallmapu. Los espías mapuches se habían quedado cortos al describir la fortaleza de la máquina militar inca ¿Quizás lo hacían para no provocar un pánico mayor o tal ves porque jamás contaron una cifra tan desmesurada. Setentaisiete mil soldados de infantería armados con huaracas y mazas de ocho puntas, diecisiete mil lanceros y tres mil jinetes, montados sobre guanacos gigantes, más un arreo de setentaidos mil llamas y alpacas de carga junto a un sinnúmero de mujeres y colaboradores auxiliares de los pueblos mitimaes conformaban un insecto larvario que se deslizaba como un mal presagio, destruyendo todo a su paso. Ya habían arrasado con los pueblos de la Ligua, Cuquimbu y Petorca , ni siquiera los valerosos atacameños, famosos por resistir en otras épocas a los quechuas, fueron capaces de contener a una tropa profesional armada hasta los dientes. Sin embargo había algo que inquietaba aún más, desconcertando, incluso a los ancianos más sabios . Tras la marea humana venía una montaña artificial de forma piramidal que ellos llamaban la Huaca Huallamarca, esta mole construida de enormes rocas que parecían unidas por algún pegamento especial les servía de cuartel general o algo similar desde donde obtenían su energía , invocando a sus dioses. ¿Alguien tiene memoria de algo como esto? Preguntó el Padre de Colqui sin mayor rodeo. -Un silencio inclemente invadió la gran ruka de Purén donde se reunían los lonkos en los momentos más difíciles. -¿Nadie tiene una idea de que puede ser? -Quiero decir algo intervino Colo- Colo con un tono de voz desconocido. -El imperio Inca es muy poderoso, desde hace cientos de años ha acumulado la sabiduría de innumerables civilizaciones, conocen el misterioso arte de unir, forjar y moldear los metales, dicen que de alguna manera logran pegar y cortar piedras de grandes dimensiones que ninguno de nuestros hombres podría sostener sobre sus brazos. Con ellas han construido una red de senderos y ciudades que deslumbran la vista con su brillo y atemorizan al más osado y valeroso. Me duele decirlo pero creo que en esta oportunidad hay que negociar -¿Qué? Preguntó casi gritando Tangalonko -Si, lo que escucharon, hay que llamar a un Cahuín y parlamentar una salida digna. -¡No puede ser cierto lo que estoy escuchando! Replicó Tangalonko con incredulidad. -Tu juventud te hace impetuoso y representas lo mejor de nuestro Pueblo, sin embargo, aún cuando nunca se ha esquivado el fragor del combate la actual es una circunstancia inédita de la cual dependerá nuestra existencia futura. Una tristeza infinita invadió a todos los concurrentes que luego de aprobar la moción de Colo-Colo, el más prudente de todos los hombres salieron de la ruca cabisbajos y silenciosos, en el exterior el cielo arremolinado de nubes negras, a punto de descargar una torrencial lluvia, parecía reflejar la dolorosa decisión que no se había adoptado en diez mil años. Caía la noche cuando el Papá de Colqui llegó a su ruka, recostándose junto a su familia.Colqui esperó a que se durmiera su madre para preguntar a su Padre. Papá ya soy un cona y quiero que me digas la verdad : Es cierto lo que andan diciendo las mujeres . . . - Te he dicho que no escuches cahuines de mujeres - No vamos a pelear contra los Incas - Es cierto, es una decisión de nuestro Consejo Supremo ¡Parlamentaremos! - Pero, papito, si reunimos a los guerreros de los cuatro puntos cardinales hay por lo menos, doscientos mil conas dispuestos a luchar a tu primera orden. - Aunque los doblemos en número, esto no se trata de cantidades. - ¿ De que se trata entonces? - Poseen una ciencia que desconocemos, esa Montaña que traen con ellos es . . . - ¡Quememos esa porquería1 - Un mapuche jamás interrumpe a su Padre. - ¿Y si no quieren parlamentar Papito? - El werkén Ancalaf no respondió, como una luna oscura y maligna lo aterraba la misma inquietud¿ Y si no quieren parlamentar? - Dame tu mano le dijo a su hijo - Ya no soy un niño Papá - Siempre serán mi niño esta noche quiero dormir abrazado y tomado de las manos de las personas que más amo. - Cinco días después, bordeando ambos márgenes del Río Maule se hallaban frente a frente las huestes mapuches e incas. Siete werkenes fueron escogidos para ofrecer al inca una salida negociada. El papá de Colqui estaba entre ellos.Los werkenes atravesaron el río en una espaciosa dalca que enarbolaba la bandera promaucae. Al arribar a la orilla se sintieron paralogizados por el enorme despliegue que rodeaba al Emperador.Tupac Yupanqui, el hombre más poderoso de la tierra. - Manco Tupac Yupanqui, señor de los cuatro suyos, descendiente directo del gran Pachacuti era el mayor conquistador del mundo, ya había derrotado a los feroces cañaris, a los moches y a la amurallada Chan. Chan , incluso 18 años antes, cuando aún era un joven príncipe se había aventurado al mar descubriendo las islas de Rapa Nui y Mangareva donde se había dejado huella en numerosos ahus de piedra volcánica. Llevado en andas por seis esclavos sobre un trono de oro todo en él exhibía arrogancia, fuerza, y poder omnímodo.- - Que se acerquen los mensajeros gritó uno de sus capitanes . . .¡Con la vista baja recalcó!en tono amenazas ador Jamás se debe mirar a los ojos al Hijo del Sol - Avanzando en una posición absurda y humillante los enviados se acercaron hasta una distancia relativamente cercana al Emperador - ¡Deténganse! . . . ¡ahora hablen! Ordenó el mismo capitán. - Señor de los Cuatro Suyos, representamos al Pueblo de la tierra comenzó a decir el Papá de Coolí articulando lentamente cada palabra para dar tiempo a los prisioneros diaguitas que actuaban como traductores. Nuestro Pueblo ha vivido en este lugar desde hace miles de años, respetando el cielo y la tierra , el mar y el viento. Somos un pueblo de guerreros, orgulloso y próspero.; pero también somos un pueblo de sabiduría y razón. Hemos escuchado de vuestra bondad e inteligencia para dirimir conflictos sin derramar sangre innecesaria, transformando en aliados a los que se suponían enemigos. Te ofrecemos la paz Gran Inca Tupac como prueba de nuestra amistad le traemos nuestros mejores regalos cincuenta cántaros de chicha de maíz, treinta pieles de pudú y veinticinco gallinas, un tipo de ave que no puede volar pero cuya carne sabrosa es digna de ser probada por un hijo del sol. - ¡Silencio ya han hablado suficiente! volvió a interrumpir otro de sus principales, Ahora va a hablar el Emperador. - El emperador que cubría con un adorno dorado la parte inferior de su rostro, sin dejar entrever el más mínimo gesto se demoró unos minutos antes de responder. - Quiero tres mil mujeres, mil quinientas vírgenes para mi goce personal y las demás mujeres…¡ casadas! ya expertas en el trato de dar placer a los hombres, esas serán para mi tropa .deberán estar aquí antes del mediodía de mañana. - Los werkenes regresaron mudos al campamento mapuche, sabían de antemano cuál sería la respuesta de los Lonkos, jamás se había escuchado tal desfachatez.Un extranjero queriendo robar tres mil mujeres, arreándolas al Cuzco como animales.Al mediodía siguiente el Villac Umu Inca, Sumo sacerdote del Imperio, se acercó a la orilla y con voz atronadora inquirió: - ¡Es la hora! ¿dónde están las mujeres que exigió nuestro Inca como señal de sumisión?. - En el campo mapuche nadie respondió tampoco se atrevían a iniciar la inminente batalla, paralizados por la ira y el temor se movían de un lugar a otro, incapaces de tomar una resolución. En ese momento Colqui y otros niños que habían salido de las rukas sin la autorización de sus padres comenzaron a arrojarl con hondas una verdadera andanada de piedras que cayeron muy cerca del trono en que se hallaba el Hijo del Sol. - Ustedes lo han decidido bramó encolerizado - Inmediatamente comenzó la batalla, los bravos escuadrones mapuches resistían los embates de los incas, incluso los perseguían en el agua ; pero la fuerza de la maquinaria bélica inca era casi irresistible, los incas, en sus embarcaciones de tótora, atravesaron, por lo menos. tres veces el caudaloso río que separaba a los combatientes ,; pero no pudieron desalojar de sus posiciones a los mapuches. Al caer la tarde los Incas hicieron traer la Huaca una enorme montaña artificial que movían por un sistema de troncos que dirigían desde la cima de la pirámide con órdenes y contraórdenes que los bravos mapuches no lograban comprender. La Huaca era un objeto mágico que los sacerdotes, en el momento de la batalla, hacían levitar sobre su base de madera para poner ponerla en la posición exacta de acuerdo a una estrategia militar, de su interior salían innumerables flechas encendidas y pequeños recipientes ardientes que eran encendidos con un combustible azul que parecía contener el interior de la Huaca. - Luego de tres días de la más encarnizada guerra, los hijos de la nación mapuche se hallaban en el límite de la desesperación. no podían seguir soportando la lluvia de fuego de esa máquina que podía flotar en diferentes direcciones. - Los Lonkos se reunieron para adoptar una decisión final: - No es posible seguir enfrentando a los Incas, tenemos muchas bajas dijo Painepán con decepción - Si pudiéramos encontrar alguna estrategia para destruir esa maldita Huaca se preguntó Tangalonko. - Aunque existiera alguna forma ya no queda tiempo para pensar, mañana estaremos todos muertos sentenció Painepán - Siempre hay tiempo masculló Ancalaf, necesito los mejores carpinteros, ¡los mejores!. - El papá de Colqui tenía una idea y solicitó al consejo su apoyo incondicional - El amanecer sobrevino en el Wallmapu dejando en el ambiente esa extraña sensación de tranquilidad que antecede a los sucesos que marcarán un antes y un después en la historia de los pueblos. El ejército inca ocupó lentamente la ribera norte del Maule, desafiantes y absolutamente convencidos de la victoria, desayunaron plácidamente antes de atravesar en sus balsas de juncos el caudaloso río, trasladando con el apoyo de doscientas naves la gigantesca huaca de la cual provenía su proverbial invencibilidad. Los principales comandantes conversaban y reían a carcajadas cuando una silueta dantesca de aguilucho despuntó en el horizonte avanzando rápidamente hacia ellos. Era un enorme ariete de madera con aspecto de águila mapuche que se deslizaba por la pendiente directamente hacia ellos. El espolón, construído con un robusto alerce afilado golpeó la huaca en uno de sus costados, los conductores del ariete , cuatrocientoscincuenta mocetones jóvenes escogidos por su robustez y valentía, habían errado , apenas un par de metros de lo que parecía ser el corazón de la huaca. Los mapuches recobraron el aliento, mediante un ingenioso sistema de palancas volvieron a poner en movimiento el aguilucho de madera, las huestes , que en un primer momento quedaron paralogizadas de miedo, ahora reaccionaban arrojando andanadas de piedras sobre la poderosa máquina de combate. El pico del aguilucho, aguzado y endurecido con resinas especiales volvió a golpear la huaca que se estremeció completamente dejando oír los gritos despavoridos de sus ocupantes militares y religiosos que no alcanzaban a salir de su asombro, menos aún a invocar la magia que le permitía hacerla levitar.. Las armas arrojadizas de los incas caían sin cesar sobre los defensores mapuches; pero los escudos y cascos de piel de guanaco impedían que los hirieran y ningún guerrero abandonó su lugar junto a las palancas . El Mecanismo volvió a retroceder como un feroz animal embravecido y se lanzó nuevamente contra la Huaca que ahora comenzó a agrietarse .El depredador había acorralado a su presa , la huaca, formada por millones de ladrillos de barro agonizaba frente a este camahueto con forma de águila que la embestía . La máquina avanzó por cuarta vez sobre la pirámide esta vez la golpeó en el centro , atravesándola como un túnel, la luz que había se derrumbó derramando miles de litros de aceite que quemaron hasta los huesos a los soldados que lanzaban flechas desde su interior. Al derrumbarse la Pirámide los batallones incaicos huyeron despavoridos mientras el campo era ocupado por trescientos mil guerreros araucanos, apoyados por escuadrones de todas las razas y especies del Bosque, además de la gente de la tierra, el ejército del Wallmapu contaba con la asistencia de cientociencuenta cóndores y aguiluchos, trescientos caranchos y buhos que hacían el papel de agentes secretos y más de quinientos pumas y cincuenta milodontes que hacían la veces de infantería pesada. El combate dejó de ser incierto cuando se enfrentaron hombres contra hombres, la superioridad numérica de los mapuches y el terror que seguía ejerciendo la artillería de su pesada máquina fueron decisivos. Al caer la tarde a batalla había finalizado, la raza de cobre había sido aplastada por los hijos de la lluvia El año 1485 no sería jamás olvidado .Al día siguiente los oficiales mapuches permitieron a los sacerdotes incas recuperar los restos para que fuera devuelta al Rimac desde donde nunca volvería. Vencido y humillado el Emperador Tupac no regresó a internarse en el Wallmapu, regresando a su refugio dorado en Quillota, en el valle central de Chile y luego al Cosco, en el ombligo del Mundo. - - -
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