Los enredos de la vida...
Recuerdo ese día cuando entraron 2 policías a mi casa, eran como las 23:00 de la noche. Estos comenzaron a decir palabras sin sentido y luego…
El silencio que se mostraba en esa sala, paralizaba a quienes estaban presentes.
La sensación de desesperación era igual a la que alguna vez he de haber sentido en los momentos más trágicos de mi vida.
El dolor que se reflejaba por cada palabra que decía, estas eran palabras desgarradoras y muy fuertes, el dolor de esta persona cuando se dio a saber que su esposo no existía mas en esta vida.
Sus llantos eran como una espada para mi corazón, puesto que ella era la persona que me trajo a este mundo, era mi madre a quien veía llorar, gritar y lamentarse, era a mi padre a quien perdí a los 8 años de edad. Desde este entonces mi vida se vio al revés, todo lo que una vez conocí desapareció en cuestiones de segundos, Mi casa, Mis amigos, mi país y mi padre.
Nos mudamos a otro País, cuando llegamos mi madre había rentado una casa, esta no era acogedora, era lamentable, pero tuve que acostumbrarme. Mi madre no soportaba el dolor que la invadía.
Yo trataba de entenderla, ayudaba en lo que podía pero no fue suficiente, ella muy pronto entro en el agujeró de la depresión y al mundo de la droga, olvidándome completamente, en ese entonces solo veía como mi madre se emborrachaba y se caía en su cuarto a causa de la droga, cada noche. Veía y escuchaba como ella a veces se levantaba y me gritaba las peores cosas que una madre pudiera decirle a su hijo, mi vida ya era un Infierno, mi padre no estaba y mi madre simplemente me odiaba, no entendía el motivo, a los 12 años era el pre-adolescente típico, era rebelde, me gustaba hacer cosas que me hacía ver como alguien a quien se le podía llamar delincuente, era así a causa de lo que afronte a corta edad, para este entonces mi madre era total mente diferente, esta cada noche traía a alguien nuevo a la casa, cuando llegaba ni me abría la puerta, me dejaba a fuera durante horas, esto sucedía desde que tenía 9 años. Yo aprendí a cuidarme y a depender de mí, me juntaba con personas de mala influencia y bueno esta era mi vida desde que mi padre se fue, el era quien nos sostenía pero sus problemas con ciertas personas eran la mayor dificultad y este “problema” fue la carta de muerte para mi padre.
A los 15 años ya era completamente independiente, salía cuando quería, tomaba, robaba y discutía con mi madre por diferentes motivos.
Yo vivía en la calle, salía con mis amigos.
En un bar conocí a Lorena ella era perfecta para mí y tiempo más tarde se transformo en mi novia, casi siempre discutíamos por cosas sin sentidos, ella me describía como la peor persona y esto nos llevo a que rompiéramos, desde ese entonces no nos volvimos a ver, yo me fui a mi país natal a los 18 años y por supuesto mi madre se quedo, trabaje un tiempo como pescador y después me dedique a estudiar, el alejarme me izo entender cosas.
A los 27 años me recibí de empresario y trabaje en una compañía, ganaba 2.500 dólares al mes, me case y tuve 2 hijos, una niña y un niño (son lo que mas amo en el mundo), ¿mi madre?, no supe de ella y no recibí ninguna noticia de que si estaba viva o muerta, a decir verdad no me importa mucho lo que le pasaba.
Años más tarde me entere de Lorena, ella estaba a punto de ser madre
En la vida hay momentos tristes y felices, hay oportunidades y dificultades, pero también hay esperanzas y 1 sola decisión, la decisión de seguir o estancarte en el mundo al que llegaste, ese mundo de delincuencia. Solo tú eres el dueño de tu destino y solo tú sabrás que aras con él.
Nota del Autor
Este relato en su totalidad es ficticio.
Lo escribí a base de películas y así pude entender algo de lo que significa el mundo
Al cual perteneces la mayor parte de los jóvenes hoy en día

¡Les mando saludos y besos!