Numero 96 - 1.2
Publicado en Feb 24, 2013
Es un cuarto serrado, con una cámara en cada esquina, no hay muebles y todo es blanco. Al principio no pude distinguir la separación de las paredes con el techo y el suelo, hasta que mis ojos se acostumbraron a las luz blanca que proyectaban las lámparas rectangulares sobre mi.
Sostengo la mirada justo en un hueco entre dos de mis compañeros, no quiero mirar a nadie a la cara por el momento, sigo conmocionada y al parecer no tendré tiempo para calmarme. Me mantengo firme, sostenida por mis piernas, procuro no hacer ningún movimiento, pretendo mantenerme con un perfil frívolo, no se cuánto tiempo pueda llevarlo, por que normalmente soy muy parlanchina y alegre, pero es diferente aqui. Un hombre entre en la habitación, sus pisadas son pesadas, asiendo que todos giremos para verlo de frente. El es un militar, no estoy segura de que rango sea pero eso no importa, lleva un folder negro y grueso en la mano izquierda y una pluma tras su oreja. Nos mira imparcialmente. -Bien- pronuncia, removiendo la pluma de su oreja y abriendo el folder con un movimiento- estoy seguro que ya conocen de sobra las reglas para lo que viene, Bien- repite, esta vez escribe dentro del folder- Esto es algo que no se hace público, es el único derecho: que se guarde su privacidad, - todos miramos las cámaras a nuestro alrededor, ¿Cómo espera que esto no sea público?, todo lo que pasa se transmite en directo por la internet. Miramos las cámaras, el sonríe- pueden verles, pero no les escuchan. Tienen derecho de conocerse un poco antes de que los llevemos a su "habitad" Deja de hablar por unos minutos, espera a que digamos algo, pero nadie lo hace, solo nos quedamos de pie. -Bien. Saldré cinco minutos elijan al líder en ese lapso de tiempo- Se canso de enperar, por supuesto que lo ha hecho. Tambien yo lo he echo.
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