Déjame confesarte que soy débil
Débil ante la inmensidad de tu todo
 
Tu todo y sus partes
Como la rosa, la piel,
Y esos labios rojos…
Que casi nunca controlo.
 
Déjame confesarte que soy fuerte
Fuerte en un minuto de cientos
Que cada paso que doy
Es para ti, ¿o
De mis pobres sentimientos.
 y casi siempre
Siento tus golpes
Como esferas de fuego
Que lastiman lento, y lento pienso
Que ayer te vi venir
Hoy me encarcelo en tu viento.