CUENTO CUYO INICIO ES
Publicado en Mar 07, 2013
Ya antes de despertar Mario tuvo una sensación extraña, cuando abrió los ojos y giró en la cama se dio cuenta que estaba solo. En otro momento hubiera pensado que su esposa estaría en el baño o preparando el desayuno de los niños, pero el completo silencio de la casa, le recordó que ya no estaban. Todo fue de una forma tan vertiginosa, ni si quiera tenía claros los detalles; ese fin de semana parecía que era uno de tantos, el alboroto de los chicos, las prisas de su esposa, el ir y venir, para tener todas cosas en orden y listas para salir, se tumbo en una butaca, que estaba en la recamara, el sol le daba la bienvenida al nuevo día y el estaba solo, solo en ese lugar que un día fue su hogar y ahora se había convertido en su cárcel, le dolía la cabeza, el cuerpo, y el alma, puso la cabeza entre las manos y empezó a llorar, de rabia, de frustración, de impotencia, quería morir, nada tenía sentido.
Un impulso de ansiedad, lo precipito fuera de la recamara, le faltaba el aire, necesitaba huir, todo en la estancia estaba en penumbras y el silencio reinaba, con lagrimas en los ojos y con una mueca de dolor, se dirigió a la cocina, sus ojos están llenos de soledad y desesperanza, llegó a la cocina, dirigiéndose al cajón de los utensilios lo abrió, saco un cuchillo, decidido a terminar con su dolor corto su cuello, se desplomo en el suelo, sintió como se le iba la vida, era una sensación de pesadez, de aletargamiento, en su mente revivía el accidente, escena por escena donde su familia se perdió, finalmente un espasmo fue su ultimo suspiro de vida. Lunaoscura
Página 1 / 1
|
Tomas R. Ramirez
Con respecto a la psicología del suicida: el suicida de verdad, no el que hace el intento, es aquel que ha quebrado su relación con el mundo. La relación entre un ser humano y el mundo es el LENGUAJE. Cuando una persona se queda sin hablar. Cuando no hay nada que ya quiera decir. Ha quebrado la conexión con este lugar. Es difícil entenderlo desde la psicología, ya que el suicida no pertenece a ninguna estructura clínica de por si. Puede ser un neurótico, un psicótico o un perverso. Pertenece al mundo de las psicopatías, que es una nebulosa sobre la que nadie ha echado luz aún.
Edith Zepeda Hermenegildo
Tomas R. Ramirez
kalutavon
Edith Zepeda Hermenegildo
Gracias por tu comentario.
Mira, de alguna forma he estado cerca de personas que decidieron terminar su vida, lo que pude observar, es que para ellos no hay nada importante que los aliente a seguir, es como si tuvieran un agujero negro en el pecho, se sientes desolados, por más que los animes, no hay nada y es tan grande el vacío que sientes que eso les da el valor de quitarse la vida.
Te mando saludos, hasta pronto