Sería un problema tenerte cerca
porque si ahora que estas lejos
mi corazón late con más fuerza
y experimento estas sensaciones
que no dejan de desbordar mi pasión.
 
Cuando el azahar te encuentra
mis manos comienzan a temblar,
mi boca se reseca y sabe a hiel,
mis ojos nerviosos te observan
queriendo tenerte para abrazarte.
 
Eres una mujer digna de admiración,
adorable a la vista que te observa,
encantadora y sin igual personalidad,
mi mente a cada instante te piensa
y se eriza cada poro de mi piel.
 
Eres mi prisión, mi condena, mi castigo
pero también mi libertad, mi perdón
lo eres y serás todo menos mi olvido,
eres casi mi mujer más perfecta
salvo el hecho de que no seas para mí.
 
Patética siento toda mi existencia
por estar amando a una mujer ajena
generando en mi corazón tristeza
porque eres dichosa al lado de otro
que solo espero te ame como mereces.
 
No podremos más que ser amigos,
me regalaras una sonrisa, un saludo,
un sentimiento vacio que hiere mi Alma
no siendo más que mi eterna ilusión
pero sabes que deseo tu felicidad.
 
Mi error fue no llegar antes a tu vida
y ahora amo a una mujer prohibida
que a pesar de todo lo contradictorio
sigues siendo musa de mi inspiración
la fuente inagotable de mis versos.
 
Para ti siempre mis mejores deseos
que nunca dejes te invada la tristeza
a sabiendas que haras feliz a tu amado
sere mero espectador siempre a tu lado
amándote en silencio y en secreto.
 
Encierro sentimientos frustrados en mí
sin ser presa de celos soy cobarde
y el miedo me impide decirte lo que ansió,
quisiera hacerlo pero me lo impide el deber
y se hunde mi corazón consumido de tristeza.
 
Este humilde poeta que vive en sus letras
sumido en el dolor por no poderte amar,
te ama con todas las fuerzas de su ser
pero estas palabras jamás saldrán
de mi boca para rozar tus oídos.