Una preocupación constante, como el frenesí de un latido;
extraño, tonto y terco.
Que se niega a olvidarte...
Que lucha contra el tiempo y el olvido
Que aún así se esfuerza por resignarse
Por convencerse a sí mismo,que ya no volverás.
Que tu cara en mis recuerdos,sólo estarás....
Que la dicha de verte me ha sido negada.  
Eres, aquel sol que opaca mis mañanas y marchita mis días
Eres, todo los que odio y lo que deseo
Por ti, detesto el pasado y añoro el futuro...
Una pesadilla obsesiva, un ídolo estúpido, un recuerdo tardío.
 Porque me cuesta dejarte ir... eres solo un capricho
Algo pasajero, sin importancia...
Alguien que probablemente ya ha cambiado
y ya no es el mismo. 
Tus lugares, tus risas, tus sonrisas
rompen los años, se vuelve intactos
añejos con el transcurrir del tiempo
como si cruzar por ellos y recordar fuese tan sencillo como vivir.