Loba que aúllas sin luna,
Devorando al mundo
De un mordisco,
Con un pelaje tan blanca
Como la nieve,
Y una sonrisa tan
Cálida y tierna que hace
Que mi corazón
Sea escuchado al palpitar,
Tu bella voz me tranquiliza,
Y tu hermoso silencio me estremece,
Observando esos
Ojos castaños,
Que con tal profundidad en la mirada
No hago nada mas que sonreírte,
Te paras frente mío
Y sin miedo te abrazo,
Adormeces mis sentidos
Y creas la ilusión,
Que al ser despertado
Toma de la mano para levantar
a la esperanza,
Pero al ver su pecho herido esta,
Una espada que lo atravesó
Lo obstruye y el teme sacarla,
Pero con tus suaves manos
Podre liberarme de esa opresión
Pero moriré al instante
Por unos segundos de libertad,
Para besarte una vez mas.