Perlas en el fondo,
peligrosas hechiceras.
Brazos suaves y dulces
que me invitan,
me seducen,
 y me llevan temerosa.
El mar,  más denso de repente,
entorpece  mi aventura.
Liviana me llevan sus olas;
sin fuerza, sin resistencia,
veo como me alejan del abismo
al que quiero  lanzarme,
como me apartan y me salvan
de ese mundo que cautiva
por lo  inhóspito y misterioso.
Inesperadas bofetadas me salpican
 y  sazonan más mis lágrimas.
Milagros de la naturaleza
me llaman y me llaman
tironeando mi mente
y confrontándome con mi alma
Mi mundo no es ese, me gritan;
y yo siento que es mi universo,
que es todo…
Luciérnagas amigas
señalan otras  direcciones,
son tímidas pero  insistentes
y compiten con el brillo
de esos  luceros increíbles.
Perlas en el fondo.
Peligrosas hechiceras.
Tentador es su paraíso,
oscuro y peligroso  es el camino,
brillante y hermoso el objetivo;
por eso continúo, contracorriente