• Elvia Gonzalez
elvia
-
-
  • País: Argentina
 
Se abre el rostro de la puerta:un hombre espera al viento.Sabe, como en secreto,que en sus manos tiene una piedra rabiosa y calcinada, y que sus ojos vaciaron  todas las fuentes de la noche. Siembra su violín, mientras la intemperie cae en el olfato de los gatos.Tiene la sed lloviéndole ceniza.En el leve mediodía come polvo de sol,recorre su cansancio,y cuando es de noche, pronuncia ese nombre para siempre.  G.C.Direc.Nac.del Derecho de autor  
Tu nombre
Autor: Guillermo Capece  1032 Lecturas
Imagen
Detrás de mis ojos
Autor: oscar  838 Lecturas
Y tu cuerpo  recto, enfrascado en la eterna dulzura incorruptible. Contempla el mundo derrumbarse Henchido De cataratas infinitas que engendrane fluidos subterráneos mientras,  impacientes evocamos  cada ligero renglón que describe tus designiosY en la ausencia de tu voz, Esperando tu voluntad nos postramos dedicados a sentir la vacuidad previa al contacto de las almas ,recogiendo  retazos  desperdigados de una espiral con nombre de universo
La sangre de las palabras   Halladas tan tiernas En un osado rincón Las margaritas me espolean Para reclamar a los poetas Evocando la verdad Cuando agitadas discuten el Crear sin seducir Escoltando la corriente Atisbando el porvenir Orando sin creerte Ni dando fe a tus vestidos Inútil zurcido Desfigurada actuación No latiendo con pasión Sin remedio encontraremos Escollos, desiertos Atados al asiento      Esta mañana He soñado todo el tiempo Amar y llorar cada renglón Que de tan hondo sentir Nos comamos los hombres Desde alturas remotas Bajo nubes jugosas Veamos la tierra florecer Ciega y sincera Con nuestro nombre crecer Espléndida amiga Ofrecida por Dios Nos vislumbres concedida A los eternos olvidados Con la pluma abierta Y el papel colmado Mientras la tinta anhela La nueva historia Que brote de nuestra entretela     
La ventana estaba entreabierta y olía a humo. Cuando me incorporé estaba acorralado en una granja lejos del mundo.Vi a las esclavas completar la ronda una detrás de otra conun margen de cinco metros. Al voltear el edificio la luz naranja se tornaba verde hasta que un pájaro, cualquier cosa, hacía sospechar un cambio en su sistema periférico, y la alarma se disparaba. Mi frente era un lago, 2014 se había fundido con la historia, y sólo la foto de Amí me recordaba el calor  decasa,La huida, me hallaba rendido aquella noche, y desarmado.Dos vueltas y a la tercera se despejaba un paso de diez metros entre ellas extendiendo su itinerario programadopor el recintoLa última oportunidad de sumergirme en la noche y desaparecer, no dejando pistas.Agarré la saca por el hombro y salté desde el granero en dirección al bosquecillo que lindaba con la parcela, sinllamar la atención de ningún ganso. Me senté contra un tronco recomponiendo mi respiración sin mover un ápice mi postura. Cerré los ojos para descansar Fue en un instante cuando mis párpados traslucieron el oro blanco de la luz matutina, gobernada por el reposo de la naturaleza Las esclavas, simularon ser invisiblessupervivientes, silbando a la mañana la ilusión provocada, La humedad me envolvía y cuando levanté la vista un cartel señalaba la granja.Erigida solitaria, imponía su  hermético semblante sin indicios de actividad.  Una esclava, la más grande de todas, asomó su ridícula cabeza verde desde el portillo y  quieta me escudriñópalmo a palmo, barruntando el cortejo. La densa saliva manaba en un hilo irrompible deleitándose con la imagen de la violaciónEn un acto interminable y horriblemente extraño el insecto concluyó la penetración, volando de nuevo,Me supe en otro cuerpo, sin duda más ágil y limpio, execrando mi piel sobrante, y moví las alas contemplandodesde la altura a mis víctimas, la versión multicolor de mi abdomen les daba miedo.
Asalto
Autor: javier castillo esteban  414 Lecturas
No conviene ahondar demasiadoen la pregunta laceranteque busca la raíz de la existencia, del adiós definitivo,de la desconocida persistenciade lo que somos... Desde mi ventana abiertaveo volar una paloma blanca.Yo sostengo el pensamientocomo el vuelo de sus alas,y digo en mis adentros:hay que volar y vivir, despreocuparse,no bajar a las honduras del sufrimiento,lo que ha de ser, será,pues el futuro que no conozcono es mi tiempo.                                                             Enrique González Matas                                                            (De "La caza del viento")                                                                    
Naúfrago.Comido por el subsuelo de algún mar desconocido,cabalga, como un barco hundido en mi sangre,una ciudadcuyo nombre es la hermosa majestad del hechizo. Comprendo que todo se fue.De la manera gris de la aventurala luna y su blanco mérito partieron:tu íntima forma de alegría,una risa a menudo sombra. Y no salimos a habitar el aire.Las copas se llenaron de entristecidos labios,y tu voz quedó en un reino donde las siestas eran preanunciosde todos los escándalos. Desnudo,sabiendo que existe el desamparo al borde de tus párpados,viéndome a mí mismo transitar las calles enmarañadas de árboles y casas,como si sus puertas se hubieran cerrado al unísonoy sólo quedaran copias de lo que fueron...,desnudo y náufrago,trato de abrazar la necesidad de una bocay sus nocturnos ecos.Pero soy un cerrado lecho de arena donde convergen los reprochesy todos los recuerdos.  Cielo de medianoche: es inviernoy todo apresura mi duelo. G.C.  
    He soñado con la luz amarillenta al pasar frente a ti, Guarecido entre castaños, convertidos en infancia desperdigada, Y el gris infinito de las aceras de Pamplona   Vaga memoria de unos ojos vastos, saturados de saber En un minúsculo espacio Y bigotes encendidos en postura reflexivamente conciliadora   Recuerdos del frío detenido en tu regazo, Bajo el perentorio efecto de la hipnosis literaria Donde tus hojas no han dejado de pasar, como incansables filos sobre el viento Poseedoras de la historia más reciente y pasada, erigida frente a la mano censuradora Y asomada, desde la reticencia, cautelosa Escudriñando los establecimientos atiborrados de sospechosa cultura   Allí aprendí a leer, violado por las palabras Enjaulando mi inocencia en pos de conquistar una tierra lejana a la cotidianidad, y al mismo tiempo extrañamente familiar. Aventuras y miserias he absorbido, robando una brizna de intimidad a los personajes más singulares y célebres, escondidos en aquellas hondas estanterías de madera.   Qué triste duerme la calle, ahora que ya no respiras con versos Pues todas las noches escucho los sollozos de tus paredes Derrumbadas de silencio,   Y en esos momentos cuando la luna todavía no ha mermado rEAPARECE El murmullo de los libros que abandonaron el altar ReverberANDO  plácidamente en los dormitorios encendidos Emitiendo la señal de una vida que no se ha consumido A pesar de evidenciar el vacío mortal de lo que un día fue su hogar  
Imagen
LAS FLORES Y EL MAR
Autor: Betsabe  621 Lecturas
Imagen
volver a escribir
Autor: josefina  426 Lecturas
Imagen
La Foto
Autor: maria del ...  1041 Lecturas
Imagen
Susurros
Autor: C.S Marfull  720 Lecturas
llegas...te vas sin decir nada, acaso no te das cuenta, acaso no miras mis ojos,sera que la espera no la sabras valorar; te he esperado tres veranos y un invierno...sigo aqui como paloma esperando volar hacia el nido, como el bosque esperando la lluvia...Te he escrito y tu has llegado sin saber a que vienes, llevo años sentado en mi valcon, en nuestro valcon aquel donde miramos el amanecer y juramos amor eterno... Aca estoy amada mia...
primero tenemos que creer en nosotros mismos para después crear conciencia en los que no la tienen...
vivir sin preocuparse por los demás es como ver el mundo con los ojos cerrados, he imaginar que no pasa nada en tu alrededor.
ver como la humanidad toma una realidad inimaginable es doloroso, pero es mas doloroso solo sentarse a esperar que algo divino lo cambie sabiendo que nosotros mismos tenemos el poder para hacerlo...
aveces no se necesita a otra persona para ser mas felices, pero si se necesita para ser mejores seres humanos...
cuando la conciencia calla el alma muere porque en consecuencia el sentido común dicta que un hombre sin conciencia esta destinado a la maldad... 
Imagen
AHORA . . .
Autor: Marìa Vallejo D.-  1305 Lecturas
Imagen
EXISTENCIA
Autor: Betsabe  652 Lecturas
Tan pronto como alguien admiramos,ya nos pensamos hermanos.Tan pronto como nos creemos buenos,ya pensamos que nadie es menos.(La moral prostituida)
Imagen
BREVE POEMA 198
Autor: JORGE AMADO  303 Lecturas
  En otra ocasión escribí sobre las coplas en Colombia. Quiero hacer hincapié que este tipo de expresión literaria es típicamente campesina y costumbrista, de manera que el lenguaje es el de las personas que compones estas estrofas de cuatro versos en heptasílabos u octosílabos con rima consonante. Los compositores de coplas se dan el lujo de inventar ADIVINANZAS  sin romper las normas que rigen la copla y aquí va una tanda de acertijos picantes, como lo indica el título: LAS RESPUESTAS van al final del artículo. 1.    De largo tiene una cuarta Pulgada y media de grueso Tiene candela en la punta Y hecha caldo pu´el pescuezo   2.    Dos pares tiene la vaca La mujer un solo par Sean corticas o sean largas Las mueven al caminar   3.     Lo hacen el rey y la reina Príncipes y cortesanas… El mendigo y la mendiga En el suelo o en la cama   4.    En libros escrita está Como santa y muy doncella Pero a la hora de la verdá Todo el mundo abusa della   5.    ¿cuál es el santo a que acuden Las gentes de la ciudad Cuando les apura o sufren Una gran necesidad?   6.    Estirada boca arriba Entre dos arboles tá Pa quiuno se acueste encima Y hacerle pa´qui y pa´lla   7.    Boca abajo o boca arriba O también de medio lao Pero es cosa muy jodida Hacerlo desde parao   8.    Agarrándolo en la mano Así me dijo mi amor Entre más grueso más bueno Y entre más largo mejor   9.    Pa´meter la puntica Por la estrecha rajadura Me la soban con saliva Pa´que se ponga bien dura   10.Las mujeres por su gusto Se mandan romper el cuero Las bolas quedan colgando El palo tapa el agujero Por ahora no los molesto más, espero que hayan adivinado todas. Tengo una buena colección de coplas picantes pero sólo si ustedes las piden, espero los comentarios. Las respuestas son: 1- La veladora, 2- las patas (con el perdón de las damas), 3- dormir, 4- la ley, 5- san-itario, 6- la hamaca, 7- dormir, 8- el plátano, 9- la aguja y el hilo, 10- los aretes Edgar Tarazona Angel http://edgarosiris310.blogspot.com  
Imagen
LIVIANA.
Autor: María Ester Rinaldi  550 Lecturas
Siempre habrá una gota de separación cuando la lluvia moje los árboles y el perdón esté tan lejos,como ese pájaro suicida que canta por sus ojos el poema y se pierde en la palabra vagabunda. Entonces, debajo de la piel, algo nos desangra, y es una manera de ir envejeciendo.La lluvia estará sola sin otro miedo que el de su propio espejismo, como una fogata de recuerdos que se consume sin saberlo.   G.C. 
Vaticinio
Autor: Guillermo Capece  383 Lecturas
En mis noches eternasde soledad e insomnio  solo imagino que tú estas aquí,siento tu aliento tan cerca, tus cálidos brazos, tus manos,tus hábiles e inquietos dedosque sutilmente hurgan mi adentros...Entonces, se encienden los fuegos,la sangre se agolpa en mi pechomi respiración se agita de tal modoque dejo escapar intensos jadeos,se interrumpe el silencio de la alcoba...Vienes y calmas con tu etérea imagenmis ansiedades, mi desasosiego,Eres en mi vida, ¡todos mis anhelos! Todos los derechos reservadosLIAAZHANY 
Ansiedades
Autor: Liaazhny  345 Lecturas
Imagen
Simplemente no se puede...
Autor: Nahir  603 Lecturas
No vuelvas a caminarpor la senda en que perdistetus mejores ilusiones.Aquello ya pasó. No vuelvas a la misma puertaque te adentró engañadoen los besos traicioneros.Aquello ya pasó. No vuelvas a creer sofismas huerosde teorías cerradas en el aire.Aquello ya pasó. Los errores del pasadoallá quedaron,no volvamos a pisar el mismo polvode los caminos perdidos.                                                       (de "La caza del viento")                                                        Enrique González Matas  
 Mi sombra se pasea mirando la noche que tiembla bajo los ojos de miel de los muertos. Son bravuras extremas de ella, que, como la evolución de un trompo,definitivamente fenece. Leo en las palmas de mis manos el sabor de las nubes cuando lloran en invierno. Es un llanto mágico que se abre cuando muero, porque mis plegarias extranjerasno alcanzan al cielo, y mi corazón se enfría. Entoncesquiero destruírme pues los lagos de mis ojos se desbordan en la soledadque yo les doy, y que mi sombra aprueba.  Ella podría defenderme, pero se queda quieta, mi sombra. Una aviesa paloma construye su nido en mi boca. No lo apruebo,pero no hago nada por salvarme. Entonces, pronto, acude la muerte,tenaz, cenagosa.Yo, impávido, casi soñando,la recibo como un niño. G.C. 
Imagen
La última ave...
Autor: MAVAL  890 Lecturas
  La maleta estaba en la sala 21, girando el primer pasillo a la derecha, después de sortear sendas puertas volteadas, resistidas a tornarse, y golpeándole en la cabeza.   Prisa salía con ella y se dio de bruces con el hombre agitado en busca de su equipación. Se encontraron de repente y él arguyó tembloroso la importancia del contenido   Cuando K. regresó a la estación se sintió invadido por cientos de miradas expectantes. Fue entonces cuando recordó lo  que a lo largo de su vida había preferido olvidar,  incontables historias de párrafos sin padre, dejando el título para otro momento.   Fugado de su ensimismamiento se concentraba en los pasos que ahora le conducían de vuelta al centro de aquellos ojos  de un brillo lacerante, haciéndose camino entre la carne vigilante A las doce recibió la llamada, asintió sin obviar la atención de sus observadores y salió disparado   Prisa había sustraído la maleta donde bostezaba la equipación, ignorante de su propio secuestro, puesto que ella no era sino la ropa que ahora vestía su secuestradora.   K. desesperado se aferró a la barandilla de aluminio cuando las piernas de su pupila afilaban el hielo ofreciendo un espectáculo sin precedentes en la pista de la vieja estación. La miraba como a una extraña, limitándose a contemplar la calidez de ese vestido tan familiar.   La patinadora saludó con gracilidad convocando el apoteósico aplauso en derredor suya, y abrió los ojos.
LA MALETA
Autor: javier castillo esteban  476 Lecturas
    Historias de gloria miserable De muertes prematuras, derretidas en invierno Miradas confundidas, dirigidas a tu regazo Imploran desgastada clemencia Con exultante apremio Mientras Viertes tu voluntad osada Erigido en tu abrasador silencio Anuncias sobre el agua clara Recuerdos de la solitaria vena Atiborrada de sangre Anciano vigilante De biblias y profetas Fusiles y cadenas Heridas de la guerra infinita Obstinado dilapidador de la simiente Posas tu primer beso sin tinta Ocultando la corriente Y aún sigues colgado del cielo Guardando el ocaso y la aurora Estampando el fresco azulado Creador de la luz y a sombra Bajo este terruño apagado
Hay una foto clásicade un beso en medio de la callede una ciudad.Él, más alto que ella, la tiene sujeta por un hombro,ella alza la cabezadejando caídos los brazos.Sus labios se fundenen un acercamientoque quiere ser total,entrega plena,mutua donación apasionada...Y mientras, en el fondo urbano,la gente va a lo suyo. Es un instante que parece eternofijado en el papel de la fotografía,imagen consagradadel beso enamorado de dos seresque se encuentran o despiden,no lo sé. Pero, seguro que despuéssiguieron otros momentos,otras escenas y gestos,y los enamoradoscontinuaron con su vidasin repetir jamás, jamás,el mismo beso,porque nada es, nunca,siempre igual.                                                                     (Inspirado en "El beso", de Robert Doisneau, 1950)                                                
 Soy inocente.Los altos cementerios de la duda,el aire viejo,el humo, el desolado puerto,han visto nacer y crecer mi inocenciacomo un callado grito que todavía aturde.Soy inocente y lo sé.¿Lo sabrán otros?¿Querrán que yo me marche desoladamente?¿Que coloque mi pie en blanca sementeracomo una estaca bien  profunda y allí me detenga? Mañana, es decir, hoy, ya,los buitres volarán sobre mi libre cabeza. Para devorar la carne impredecible pelearán entre sí.Yo sabré acompañar tanto misterioy bajaré a repetir en silenciolo que demasiado sé:soy inocente.De culpa y cargo.Inocente. G.C. 
Inocente
Autor: Guillermo Capece  432 Lecturas

Seguir al autor

Sigue los pasos de este autor siendo notificado de todas sus publicaciones.
Lecturas Totales246915
Textos Publicados310
Total de Comentarios recibidos2723
Visitas al perfil104077
Amigos100

Seguidores

7 Seguidores
Iñaki
Septiembre 13
Jonathan Landin Melo
Lyda  Garcia Espinosa
Angel Mosqueda
Luis Pérez
daniel desantodomingo
 

Amigos

100 amigo(s)
Juan Cardenas
Briana Farrera
Soñadora
**Leticia Salazar Alba**
Gonzalo
Franco  Esteban Oñate Retamal
Florimar Davila Talepcio
gabriel falconi
julian pecina
John Zapata
Ibrahim Fajardo
Karen
Pedro SR.
Samont H.
Mei
juan carlos reyes cruz
Mitzio Antonio
Lucy Reyes
Sarah Alexander Katz
Flor de Otoño (Yoselyne M.B)
veronica
J. C.
patricia amorin
javier
MIchelle Camacho
Mateo
Priscila Sarahí Burruel Ortega
Cristina Almagro
gisell
Fild
Viviana H. Mondragón Morales
Ernesto Sihuin
luis josé
Jefferson
maria del ...
Micaela
Aissa
Carlo Biondi
Lorena Mercedes
Franco
Maritza Talavera Lazo
Oscar Franco
Daniel Florentino López
Agustina Aguirre
Snookii
MARIANO DOROLA
Un sentimiento
Giako Reed
Embrujo
Francisco Perez
Guillermo Capece
Raquel Garita
Kenny Amaro
Miguel angel mata de castillo
C.S Marfull
javier castillo esteban
Gustavo Adolfo Vaca Narvaja
Joaquin Sariego
Liaazhny
Mayron Uke
Enrique González Matas
Juan Francisco Lozano
Lucy Reyes
kathleenmijares
ca,iddj
Daih
Ana Belen Codd
Nadu
Joseph Zarath
Yanet Velasco
ISIS Mariaangel.
Joshua Hernandez
Ominoso
gabriela.piris.
LIBIA ESTHER QUINTANILLA WENCES
Roberto Funes
aidee montserrat aguirre varela
Juan Jose Castillo
raymundo
DEMOCLES (Mago de Oz)
Adrian Arriagada
NORMA ESTELA FERREYRA
Oscar Ruano
un sentimiento
María Ester Rinaldi
:-(
Eduardo Sosa
Carolina Aguilar Vélez
Stella
Marìa Vallejo D.-
atzu
Richard Albacete
Mariana de Jesús
Fer Poeta y Novelista
maribel gonzalez navarro
oscar
Juan Carlos Calderón Pasco
antonia
German Karel Hanisch
Hugo Nelson Martín Hernández
 
elvia

Información de Contacto

Argentina
-
-

Amigos

Las conexiones de elvia

  Juandro
  BrianaFarrera
  miuniversomistico
  Puente de Triana
  MGCipa
  estebanescritorsurXXI
  FLOR DE MARIA DAVILA
  el bulon
  julianpecina
  john0
 
<< Inicio < Ant. [1] 2 3 4 5 6 ... 10 Próx. > Fin >>