En esta obra se explica la verdadera revelación de como es el infierno, contradiciendo en total a las falsas profetizaciones anteriores, tal cual como explica el hermano encomendado, de que el infierno no es como se ha profetizado, mas es un mundo frío, desolado, .... y los condenados mas están vestidos con piel de animal con sin rumbo caminantes por eterno..... y no es cierto que están gobernados por alguien o Satanás u otros.
Cuando entraste todo un obrero,ni siquiera te di importancia,mas pensando en un príncipe entrando,no sé, como te vi de reojo como sin querer,y tú..... continuará Autor: Francisco Lope Rojas
Trata que los muertos podían ver y saber de los tesoros, lo que los seres vivos no podían ver, ni saber, obra que trata de una conversación de un muerto con un ser vivo. Del más allá.
La atracción no es todo,así cuando el amor no nace, no crece.Que todo es hipocrecía, solo ilusionado y pasajero,prefiere ser claro y decir adios.Porque sino, tú mismo te engañasy haces daño al otro,con tu hipocrecía de buen amante.Entonces lo que no nace, no crece.
Olvidarte no, odiarte sí,estarás atado en mí pensamientocomo una sarna embrujadasabes porqué, es que yo, te amé de verdad,pero tú, egoista, solo te amabas,mas me engañabas con tus mentirasde cuanto me amabas,entonces te odiaré hasta el último de mi existencia, pero nunca olvidarte,por lo lindo que yo pasaba contigo,aunque tú, no lo hicistes.
Después de haber echo el amorlos amantes se quedaron tan dormidos,donde ella, en un corto sueño se soñó,que su amado esposo no había viajado como se despedió de ella,mas él, estaba viéndoles de como ellos hacían el amor,entre ese sueño se despertó y huyó que el perro aullabacon una sinfonía orquestal de funeral. Donde ella al escuchar, sintió tenieblas en su cuerpo,y mas se cubrió con las sábanasy enroscándose al cuerpo de su amante,pero siguió escuchando el aullido del animal,mas preguntándose y anunciándose,que solo tú, Negro, sabes mi destino,y así le jaloneaba a su amante contono de sinfonía sepulcro. Despierta Panchito, sueño del muerto te ató,amor mío despierta, me encuentro sola,mientras el perro seguió aullando lleno de la calle como ya atrapando a alguien, mientras ella siguió jaloneándole,amor mío despierta, acaso sueño del muerto te ató,mientras Panchito seguió sin mas despertarsecon su sueño eterno. Mientras ella iniciaba a sentirse sola,como que su cama desde ya iniciaba a infriarse, mas volteándose para todos los lados estaba,y ya, con ganas de llorar o gritar,al ver que su amante no se despertaba,mientras el perro, mas no aullaba, sino estaba ya ladrando como aun delincuente o asesino, ya como atrapándole,y ella siguió entre tenieblas, es en eso,escuchó los pasos de un caballo,donde de inmediamente le terminó los nervios a su cuerpoy su sangre se enfriaba,mientras ella, con oído a su esquierda huyó con atenciónpreguntándose, quién podría ser o estar pasandopor la calle, y los pasos del caballo no mas se huyó, donde ella se quedó en silencio sin mas respirar, pues en ese silencio, tocó alguien a la puertay ella botó tan rápido a la sábana y puso mas atención y preguntándose,oí bien o estoy sorda, y otra vez tocó, mientras el perro estaba ya atrapándolecon sus ladridos a alguien, es donde ella se preguntó, si fuera mi amado esposo,Negro lo recibiría con cariño, pero, quién podría ser,pues en eso, parecía que al perro le dio como una patada, así el animal se corrió con su aullido lloroso adolorido,y mas si huyó unos pasos extraños. Y otra vez tocó la puerta,mientras ella estaba jaloneándole a su amante,amor mío despierta, que maldito sueño eterno te ató,mientras su amante no mas despertaba, entre esa textura de ahogo y temor se preguntaba,será que mí amado esposo regresó de su viaje,y así dio una palmada y nada, susurró de su oído, Panchito...., amor mío, despierta, no te quedes dormido,alguien está tocando la puerta. Es donde su amado con voz tosca llamóCéjara, Céjara, pues ábreme la puerta,y ella, dio volantin de su cama, mas ya llorando,y a la vez jalonenado a su amante para quese despertara y contestándole al viajero,amado esposo, espérame un momentito,espera que me ate la sandalia y la falda. Mientras los vestidos y la sandalia estaban texturándose,como en conflicto con el calzón, por los celos,es donde ella dio volantin hacia su delante,por la trepadera y alcahueta de su calzón,ya delirando por el temor,sin mas poder hacer nada,entre esas texturas,y sobre esa oscuridad como ya enseñado. Es donde el viajero dio una patada y la puerta se abrió y así entró,siendo él, todo rústicó, mas tropesándose con su propiobastón de acero, y ella, entre esa textura de atadurascorrió a recibirlo, arrastrando su vestido, donde él lo empujó como a un trapo,ella, sin mas sentir el dolor entre ese temor dijo, amado esposo, porqué regresaste, no habías viajado,y él no lo huyó, mas dijo toscamente, enciende la lámpara, así él botó su ponchosobre encima del batán y se sentó, mas lanzandola botella del trago y rústicamente toseó,mientras ella se paró en la puerta,pensándose, que su amante ya se escondió. Y el viajero otra vez pidió que encendiera, mientras ella se hacíao se demoraba, en eso él empujó a ella y pasó hacía su camay se sentó en la esquina, mas sacándose las botas y lanzando hacia el rincón,y así dio un jiro como rapando a la cubrecama, y tocó un cuerpo, mas se levantó tan rápido,y encendió su lámpara a pilas,y vio que un hombre estaba desnudo,mas volteado su cuerpo, y ella encendió la lámpara,y el viajero volteó la mirada hacia su amada,y lanzó hacia el espejo aquella lámpara de a pilas con una furia,donde a la vez se recordó de los comentarios de sus amigos,quienes le hablaron de su infidelidad de su amada,y era cierto, donde ella corrió bajando la cabezamas mirando a los pies, a quién nunca lo había mado,y se lanzó como atrapándole con sus dos brazos,y atándole de sus.... ........... continuara. Autor: Francisco Lope Rojas Protegido bajo las Leyes.
Ahora esperas que te llame, y leer mis mensajes,ves a cada momento y nada, lo golpeas y lo acaricias,mas recordándote de mí, te odias, a la vez me odias,deseas llamarme, pero no te atreves,porque la conciencia tuya, te da vergüenza.Por mas que no quieres verme,siempre a escondidas ves a mi foto, y sueñas un momento conmigo, y al despertarte lo volteas mi foto,mas insultándote, pero sí,aun con la esperanza de volver a verme. Autor: Francisco Lope Rojas
Amor de lejos, amor de hipocrecía.Cuando me escribías con belleza,mi ilusioné, mi alma se llenó de alegría,y yo, lloré por la felicidad.Estando cuidando a todo el tiempo el celular,sonar los mensajes, y ya esperando a leer.Soñé que me enviabas mensajes,y yo, desperté ya cojiendo el celular,mas solo estaba marcando la hora.El último mensaje lo guardé, como anunciándome,que tal vez, no mas me escribirías, y así fue.La ilusión, a cada instante,se me llenaba al vacío de mí alma,y ya esperando el día para conocernos,y así entregarte mi alma.Y cuando nos conocemos, me volteaste la cara,te di asco, aquella cena, no era de tú agrado,no mi mirabas, mas estabas arrepintiéndote,y mirando a tu celular a todo el rato, mas culpándole. Me di cuenta, que no valía nada para ti,la escasés de tu mirada,me decía, adiós, me das asco,mí inteligencia y el oro, no te interesaba. Al pasar a un hermoso, miraste con alegría,donde de reojo mi miraste, y te dijiste en ti,yo amo a la belleza de la corteza humana,y no me interesa su interior. Tu silencio y la fría despedida, ya me explicó,que no soy para ti, pasados horas te llamé,porque tu ausencia, me extrañaba,y tú, colgaste el celular, y yo, me desesperé, y te llamé otras veces, y tú, apropósito le distes, a ese hombre, para que me contestara,tal vez riéndote.Al día siguiente, por fin me contestastes,y yo, con celos en silencio te pregunté,quién era aquel hombre, aunque no tenía derecho,y me respondistes, qué, acaso nos conocíamos,Pero los bellos mensajes que me escribías,y las conversaciones poéticas,yo no fui, el celular te enviaba los mensajes,son nuestros celulares que se conocían, yo no.Es donde mi alma se lloró en silencio,y me tragué mi ilusión,mas criticándome, que yo, no era feo,mas ella no conocía a mí alma,quien solo amaba a la belleza,ni siquiera compartía su hipocrecía. Aun las miradas mías siguen hacia el celular,así dándome esperanzas, y con perdonarte,es porque a ti, mi alma se escogió,aunque tal vez, nunca seré tuya. Autor: Francisco Lope Rojas
Ya nunca mas te amará,este humilde corazón,porque tú, lo has menospreciado,mi alma, mi inteligencia, mi honor.Has destapado el cofre de mí amor,y se fue la magia de mí amor,con tú menosprecio, y se fue llorándose,para nunca mas regresar, ya nunca mas te amará,como te esperó.Fuistes tú,la desagradecida para mi amor,y eso nunca lo olvidaré,porque nunca supiste valorarme,ni siquiera como a un amigo extraño.Mas me trataste mal, con tu orgullo,y eso se paga muy caro,ya tarde te darás cuenta, y eso será tu castigo.Hay cariño mío,este corazón,ya nunca mas te amará,este humilde corazón,ya dejó de latir por ti. Autor: Francisco Lope Rojas
Te odio cuando estás en mi lado,porque no te tengo, las iras me consume,por solo verte a mi lado, y no te tengo.Ante los demás, sonrío para disimularlo,que estoy bien contigo, y tú, no estás conmigo,mas estás en mi lado,tal vez riéndote estás.Y solo a ellos,tengo que verlos con reojos de amargura,mas cubriéndote,que tú eres mi alma gemela,pero tú, no estás conmigo,mas estás ahíviendo a las otras.Te odio y te admiro, brillante eres,estás en los ojos de los demás,por ti me menosprecian,y ven con reojos, de tú,pero tú, no eres mío.Te odio, me haces sufrir, y tú, no me dices nada,esperándote estoy, las arrugas ya me alcanzó,y tú, mas sigues a mi lado,sin decirme nada.Te odio, amanesco y anochesco odiándoteporque no te tengo para mí,ni de compañía te sirvo,mas solo estás a mi lado, viviendo tu vida. Autor: Francisco Lope Rojas
Esperastes que me fuera de tú lado para ser feliz.Porque no fuistes conmigo, tal como estás con él,que egoísta fuistes, te amé mas que a mi propia vida, que egoísta fuistes conmigo,en qué, te hice daño para que me hagas eso.Egoísta fuistes, ahora te admiro desde mi paraíso,te admiro por tus dos caras, y me arrepiento de no haber tenido dos caras como tú, por eso te admiro.Egoísta fuistes, y no me dijistes la verdad tuya,y ahora te ahogas con él, porque no es tonto como yo,inicio a reírme por tu tragedia falsa,porque él, nunca será como yo, en nada se comparará conmigo,te gusta como hombre, pero no te llena al vacío, como lo soñastes cuando me engañabas.Egoísta fuistes, pero, ni tú también lo eres feliz, como yo no fui, ahora te arrepientes de haber sido egoísta,y no puedes como regresar al pasado de lo nuestro,y ahora lo ves con la ira a él, y culpándote estás.Y mencionas mi nombre, y arrepintiéndote te ahogas,por no haber compartido tu felicidad, y recién te avergüenzas de mí,sabiendo que egoísta fuistes. Autor: Francisco Lope Rojas
Nunca amada mía llores,cuando me vaya para siempre,cuando ya no regrese, solo dile a alguien, que ya no volveré,porque, ya soy tierra.Y sí, mi espíritu te visita en tu sueño, no despiertes llorando,mas alégrate, es porque estoy contigo.Si por mí lloras amada mía,mi alma será condenado, y mi espíritu se ahogará,en las gotas de tus lágrimas.No vayas a ver a mi tierra, porque ya no estoy ahí,solo están mis huesos,que un día los lamistes,al ver a mí tierra, y al sentir mis aromas,te ahogarás en tú soledad,solo viendo a tu alrededor, mas quédate junto a alguien,porque mereces ser feliz, y no importa quien te critique.Mas yo, estaré feliz, sabiendo que alguien te hace compañía,y agradeciéndome a él, por hacerte mas feliz que yo. Autor: Francisco Lope Rojas
En una noche de estrellas,viendo a las estrellas dije,amor, amor mío,¿ves a esas estrellas? y apunté,y luego la besé y dije en mí,que cada vez, que ves a las estrellas,te recordarás siempre de mí.Esta noche y las estrellas,jamás se borrarán de tú mente,mi imagen y mi beso, siempre estará presente,que cada vez, que ves a las estrellas,y yo, estaré ahí por siempre,en tú pensamiento y recuerdo,aunque estés acompañado de otro.Y por vergüenza a las estrellas,y por temor a la noche, y por la teniebla de los besos míos,bajarás la cabeza,sabiendo que estoy presente, y te escondirás de mí.Y sí, te alza la cabeza él,mas cerrarás tus ojos,para no ver a las estrellas,y besarás, pensando que aun estoy ahí.Pero sentirás besos de agrio, y te correrás para esconderte, sabiendo que las estrellas,eran los testigos de nuestro amor verdadero,y porque no puedes como engañarle. Autor: Francisco Lope Rojas