Ya no sé qué decir, qué hacer, de qué manera actuar. Simplemente, no lo sé...A veces creo que te molesto, luego venis y me hablas de la nada, me aconsejas, te procupas por mi, y luego, nada. Apareces y desapareces como una ráfaga de viento calurosa en una tarde de verano. Porque ya no te siento, no te toco, no te veo, ya nada importa...Salvo ésto que siento. No hay palabras, no hay descripciones, no existe forma alguna de expresar lo que siento. Tal vez una carta, o quizás un cuento, todavía no lo tengo decidido, sólo sé ésto: "Tengo que hablar con vos, necesito hacerlo, antes de que esta locura que llevo dentro se apodere de mi cuerpo..."M.C.