No busco nada,me encuentra.Me arrebata en la espesura del silenciodonde no soy más que torre,guarida del placer desconocido,oscuro,como la noche en que sucumbo.Cubierto de luz negra,puedo ser mil rostros,un cuerpo y cien orgasmos;no los busco,me encuentran,me hunden entre olores de sexo viejo,antiguos.Perdí lo que buscabay no soy nada,sólo un rostro sin forma ni deseo.Deseo perdido en el de muchosque buscan y no encuentran.Regalo de corazón tristea miradas desamparadas,sin ojos y sin nada.